¿Cómo se curaba la Peste Negra? Los 10 remedios más extraños y extremos
Si te dan miedo las inyecciones o no soportas quedarte en cuarentena, tienes que conocer las curas más extrañas que se usaron durante la Peste Negra que azotó a Europa en 1347. La falta de conocimiento sobre la forma de transmisión de la enfermedad y sus causas les hizo pensar que bebiendo arsénico o bañarse con orina podrían curarse.
# 1 VIVIR EN UNA ALCANTARILLA
Las personas pensaban que La peste negra se encontraba en el aire por lo que consideraron que sería bueno ir a visitar o vivir en las alcantarillas más hediondas que había. Pensaban que ese olor tan penetrante y repulsivo de la pipi, popo y demás, evitaría que el aire más limpio pero infectado por la Peste negra se acercara a ellos.
Es decir, como que el aire pestilente de la alcantarilla repelería el aire normal por el que ellos creían que viajaba la peste negra y eso impedía que se infectaran. La realidad es que por supuesto no funcionó y el problema fue que al estar en lugares tan poco higiénicos, a menudo morían de otras enfermedades.
Hace poco me dejaron este comentario en un video de Youtube que hice sobre el coronavirus, donde decían que la cura era que todos se echaran flatulencias, las inhalaran profundamente y así se iban a curar. Obvio fue un comentario muy peculiar, pero si lo ponemos en el contexto de la Europa del siglo XIV seguro hubiese sido una buena idea.

# 2 BAÑARSE CON ORINA
Cómo que a las personas de esta época les latían los fluidos corporales y la orina fue algo que tenía muy buena reputación en la Europa medieval. Recomendaban que los infectados se bañaran con orina varias veces al día para aliviar los síntomas.
La idea es que el orina fuera de otra persona no infectada. La recolectaban y se la daban o vendían a la persona enferma. Quién sabe a qué terminaban oliendo. De hecho, una práctica médica muy común era conocer el estado del paciente por medio de oler, ver y hasta probar la orina.
Hasta la fecha la orina se sigue ocupado como un remedio para mejorar la salud, que van desde curar el acné hasta la esclerosis múltiple.

la que sigue es tal vez una de las más repulsivas:
# 3 FROTARSE LAS HERIDAS CON EXCREMENTO HUMANO
Te digo que lo suyo, lo suyo eran los fluidos corporales.
Mira, Así va el remedio. A las personas con peste negra les salen unas protuberancias en ingles, axilas y cuello, a los que se les llaman bulbos o bubones. Estas se hichaban y lo que hacían eran cortarlas, abrirlas y se les aplicaba una pasta.
Dicha pasta estaba hecha con resinas de árboles, raíces y flores de algunas plantas. Hasta ahí todo normal pero el ingrediente especial era excremento humano. La pasta super apestosa era metida en las heridas que le habían hecho a los bulbos y luego las envolvía.
Aquí si aplica que está igual de fea la enfermedad que el remedio porque no creo que eso haya tenido un final afortunado: seguramente una infección terrible.
# 4 FLAGELACIONES
Esta no estaba pestilente pero si dolorosa. La religión fue un refugio para muchos así que consideraban que si se flagelaban podrían protegerse. Viajaban de pueblo en pueblo, flagelándose ritualmente en actos públicos de arrepentimiento pues decían que Dios que claramente estaba muy enojado. Aquí también estuvo peor el remedio porque si iban de un lugar a otra, el contagiadero estaba peor.
Otras cosas más amigables era confesarse y realizar actos de caridad.
#5 EL USO SANGUIJUELAS y SANGRÍAS
La sangría fue muy popular en toda Europa durante este tiempo, y se usó para curar todo, desde la gota hasta el bocio. A veces se sangraba al paciente con una incisión y en otras ocasiones se usaban las sanguijuelas.
Las sanguijuleas al parecer es menos doloroso que cortar la piel pero no siempre se adherían a ella, así que tenían que ir por “la vieja confiable” o sea sacar una cuchilla, empujarla hacia la vena y drenar la sangre en un tazón.
Todo es por supuesto que sin anestesia y pues seguramente no tenían muchas medidas de higiene al hacerlo. Igual, lo mismo que los anteriores, si ya estabas mal, te podías poner peor.

# 6 TOMAR UNA CUCHARADA DE ESMERALDAS TRITURADAS
Si consideras que el jarabe que te daban en la infancia era algo horrible, usar polvo de esmeraldas trituradas no debió ser una experiencia nada agradable.
Las esmeraldas se trituraban hasta hacer un polvito, y luego se mezclaban con líquido y se bebía o también las combinaban con pan y lo comían o en su caso, las tragaban así solitas. Imagínate que te estas comiendo algo así como vidrio triturado. Seguro no sabía nada bien y la textura era horrible.
# 7 USAR PAPELITOS DE PROTECCIÓN
Las creencias religiosas también se combinaron a veces con ideas y prácticas mágicas. Las oraciones y los nombres de los santos fueron escritos en trozos de papel o pergamino que podrían usarse en el cuerpo para evitar enfermedades y desgracias. La idea era que las palabras escritas tenían una potencia mágica para disipar la influencia del diablo y los demonios.
Aunque la magia era algo no bien visto, todavía personas se dedicaban a ello.
Incluso, cuando había sangrado, se ponían papelitos con algo así como "Oh sangre, restringe tu flujo" para que así se pudiera curar.
#8 BEBER MERCURIO ARSÉNICO

Aquí nuevamente se pone esto peligroso.
Cuando las personas estaban realmente muy mal, tomaron decisiones muy pero muy arriesgadas. Eran ya medidas extremas como beber arsénico o mercurio. Por si no conoces mucho sobre ellos, el mercurio es muy tóxico incluso en pequeñas cantidades.
Y que te puedo decir del arsénico que es muy tóxico que incluso se ocupaba para envenenar a las personas.
#9 EL REMEDIO DE LA GALLINA
Una cura bastante extraña y nada útil era amarrar pollos vivos alrededor de los bubones, que son estás protuberancias que salían en el cuello, axilas e ingles de las que ya hablamos,
Este método curativo hasta tenía un nombre era llamado el Método Vicary, llamado así por Thomas Vicary, un médico inglés que inventó la técnica. Se les quitaba las plumas a la gallina y la amarraban a los bubones, todo esto mientras estaba viva. Cuando la gallina se enfermaba, se lavaba la zona y se le volvía a poner de nuevo otra gallina. Esto se repetí hasta que la gallina se muriera o el enfermo se sanara.
#10 FROTAR LOS BUBONES CON LO QUE FUERA
Esta se parece mucho a la numero tres, aunque esa merecía su propio espacio por lo drástica que era. Entre las cosas que se frotaban eran cebollas, hierbas o una serpiente picada (si está disponible) o en su defecto, una paloma
Había otras cosillas más que recomendaban para evitar la enfermedad como:
Usar plantas como protección para la enfermedad.
Se amarraban ramitos de lavanda o romero en las manos.
Beber vinagre
Usar un brebaje compuesto por cuerno molido de unicornio.
Te recomendaban no tener pensamientos sobre la muerte en general, no tener pensamientos sobre la peste, no tener pensamientos tristes, no comer higos, no comer carne, no correr o caminar afuera, no hacer ejercicio en absoluto, no bañarse, no dormir en el día y, por si acaso, no tener relaciones sexuales.
REFERENCIAS
http://broughttolife.sciencemuseum.org.uk/broughttolife/techniques/pomanders
https://www.medievalists.net/2018/02/medical-response-black-death/
https://sc.edu/uofsc/announcements/2014/05_sharondewitte_blackdeath_plosonejournal.php#.VJr0z14AEA
https://www.cprcertified.com/medical-history-the-black-death
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC5395523/
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3573364/ (MEDICINA MEDIEVAL)